CAPÍTULO 17:Acontecimientos perturbadores
Mis sospechas se confirmaron definitivamente cuando, tras consultar al bibliotecario en referencia a otra nota que había encontrado en un documento oficial del área de cultura del Ayuntamiento, este me trajo una polvorienta carpeta. Tras toser un poco y experimentar un leve picor en las manos causado por el polvo que impregnaba el legajo, abrí las tapas y el contenido que se me mostró hizo que la mandíbula inferior se descolgara como indicativo de mi sorpresa. Al parecer, en 1986, Antonio Melero Muñoz, responsable del área de cultura del Ayuntamiento por aquellas fechas, había intentado llevar a cabo un proyecto turístico de lo más curioso. El susodicho pretendía crear un espectáculo en la citada cueva subterránea, similar al que se llevaba a cabo en las cuevas del Drach de Mallorca, al que yo había asistido en el viaje de fin de curso del instituto, en el que habíamos cohabitado con pensionistas alemanes y aterrorizado a los niños de los viajes de EGB en un hotel situado en la zona de los Arenales. Las obras propuestas incluían la construcción de un pequeño auditorio en el que los espectadores podrían oír un concierto mientras bordeaban en barcas un lago subterráneo.
-Extracto de Imposible pero incierto (una novela de horror có[s]mico)
http://hemeroteca.abc.es/nav/Navigate.exe/hemeroteca/cordoba/abc.cordoba/2010/07/18/057.html