Vuelvo a esta sección, cuyo nombre nos trae a la memoria los resultados de la quiniela, con par de reflexiones en la cabeza.
Y es que he retrasado su publicación del habitual lunes en espera de poder tener noticias definitivas sobre la publicación de mi nueva novela.
Como decía el chiste del urólogo, traigo noticias buenas y noticias malas.
La buena: no va a tener que volver usted al urólogo en la vida.
La mala: le vamos a amputar el pene.
Por suerte, no es mi caso, mis noticias malas son que esta semana, como preveía en un principio, no estarán disponibles todas las versiones de Imposible pero incierto (una novela de horror có[s]mico).
Y es que la ley de Murphy, que en realidad no es tal ley, aunque se cumpla, porque no está respaldada por ningún teorema matemático o similar, y simplemente es un aforismo que acuñó un ingeniero aeronáutico estadounidense (entonces también sería ley la «Ley del Guerra: Cada uno es cada uno»), dice que, si algo puede salir mal, saldrá mal.
En este caso, imprevistos técnicos, laborales, y problemas de salud, han aparecido de la nada, haciendo que la versión física (en papel) se retrase algunos días aunque, de todas maneras, me figuro que no la comprará mucha gente (solo personas cercanas que quieran tener el libro en papel por aquello de que se lo firme, por el valor sentimental), y que la gente se decantará, si es que se decanta, por la versión electrónica.
Así que hoy he terminado el proceso de subida de la versión epub a Beperk, y la versión mobi a Amazon, y confío en que están disponibles para descarga en un par de días.
O sea, que el lunes espero hacer una entrada que sea: Ya está publicado Imposible pero incierto!
Esperemos que así sea, y que el Murphy deje de tocar las gónadas un ratito.