¿Cómooooorrrrr?

No, no creas que se me ha ido la cabeza y me he convertido en un vendemotos a la americana ofreciendo soluciones fáciles para gente desesperada o lo suficientemente imbécil como para creérselas.

Este artículo no va de eso.

Si no sería una llamada a la opulencia a la altura de esta

Se trata de una reflexión que puede ayudarte a mantener tu motivación a la hora de continuar con tu carrera de escritor.

Todo comenzó el otro día, cuando leí en Twitter este artículo del blog El libro del escritor titulado ¿Vivir de la escritura?

http://blog.ellibrodelescritor.com/vivir-de-la-escritura/

En él se comentaban datos de un estudio del centro Queen Mary, de la Universidad de Londres que habían sido publicados por The Telegraph.

En él, entre otras cosas, se explicaba que en Reino Unido las ganancias de los escritores no superaban el salario mínimo interprofesional, y que actualmente solo un 11’5% de los escritores vivían de la escritura

Estudios realizados por la Asociación de Escritores en Lengua Catalana indicaba que solo uno de cada diez escritores logra vivir de su profesión.

Extrapolando esto al panorama hispanohablante, que es mucho extrapolar, se podría llegar a la conclusión de que solo el 1% de los escritores podría vivir de ello.

Desolador panorama, dirás, si hablas con dislexia igual que el maestro Joda, como si la cosa no estuviera ya suficientemente Jodida.

Los escritores que se joda(n)

Los escritores, que se Joda(n)

 Es una forma de verlo.

Sin embargo, yo me lo planteé de otra muy distinta.

Hay gente que se pasa toda la vida jugando a la lotería.

Con frecuencia, impelidos por anuncios lacrimosos de bares de ciencia ficción en los que la gente reparte millones por solidaridad o de calvos mágicos o Monserrats Caballés que amenazan con comérselo a uno, en estas fechas nos gastamos decenas, y hay quien centenas, de euros, en comprar billetes de lotería.

Monserrat se comió

 Sin embargo, cualquiera que sepa un poquito de estadística, sabrá que la probabilidad de que te toque un juego de azar es muy muy pero que muy inferior al 1%.

Es decir, 1 entre 600.000. O sea, (corríjanme si me equivoco, cosa a la que soy muy dado con los números), 0,00000166666 %.

¡Una millonésima!

Y sin embargo, hay gente que se pasa toda la vida jugando a la lotería.

Por ese motivo, pensé yo, la probabilidad de vivir de la escritura es infinitamente mayor.

¿Por qué no intentarlo?

Así que ya sabes: hazte rico, escribe un libro.

Y si eres tan altruista como el del bar de la lotería, o los de la fábrica de maniquíes del anuncio de este año (que personalmente me ha parecido Up en versión pestiño) comparte este artículo usando los botones que tienes debajo.